Todas las mujeres les vendría bien una mano a la hora de llenar sus armarios con las prendas que mejor favorecen su figura, así que estos 5 mejores consejos de moda femenina pueden ayudarte a conseguirlo. Saber lo que hay que ponerse puede ahorrarte dinero y, sin duda, te ayudará a verte y sentirte mejor.
Encontrar ropa que se ajuste bien es siempre importante. Más allá de elegir la ropa que se adapte bien a tu forma y coloración particulares, estos consejos universales pueden ayudar a cualquier mujer a tener sólo las prendas más ponibles en su armario. No es necesario que sigas todos ellos, pero seguir incluso uno o dos puede suponer una gran diferencia.
Ahorra en lo básico:
Algunas prendas no requieren un gasto elevado. Las camisetas de tirantes, las camisetas y los pantalones cortos básicos, por ejemplo, están disponibles a precios muy razonables y bajos en tiendas como Walmart y Old Navy. No hay ninguna razón para gastar el presupuesto en estos artículos de uso diario. De hecho, dado que tiendes a usar estas piezas con regularidad, gastar menos en ellas en una tienda significa que puedes comprar más de una vez. Si encuentras una camiseta de tirantes que te encanta a un precio bajo, puedes comprar varios colores sin sufrir el remordimiento del comprador. ¡Eso sí que es un esfuerzo de estilo!
Limpia tu armario:
Este es un consejo del que casi todas las mujeres pueden beneficiarse en algún momento. Deshazte de la ropa que nunca, nunca te pones. Esto incluye cualquier cosa que esté completamente anticuada, que no favorezca tu figura, que sea una tendencia sobrante que prefieras olvidar pronto o que no haya visto la luz del día en años. Aprovecha su potencial donándolo a una organización benéfica.
Construye los clásicos:
No hay prendas que valgan más a largo plazo que los clásicos de tu armario. Entre ellos se encuentran un pequeño vestido negro, una camisa blanca y crujiente, una americana, un par de vaqueros favorecedores, unos pantalones negros, un abrigo de lana elegante, un cárdigan neutro y un vestido envolvente. Estas son las piezas en las que puedes gastar cómodamente un poco más. En otras palabras, no te resistas a un abrigo de invierno un poco más caro si te sienta bien: es algo que probablemente usarás durante años.
No te preocupes por las tendencias:
Cada temporada trae consigo su cuota de tendencias. En las últimas temporadas se han visto desde tops con hombros esculpidos y tacones de gladiador hasta lentejuelas y tachuelas. En un momento u otro, todo volverá a entrar en juego, pero no te pases de la raya con tus gastos en tendencias. Lo ideal es que el grueso de tu conjunto se componga de clásicos y se acentúe con una pieza de tendencia. Por ejemplo, utiliza un pañuelo de lentejuelas para dar un toque de distinción a una combinación básica de americana y vaqueros.
Resalte sus activos:
Tanto si tienes unos brazos fuertes y tonificados como un gran escote, unas piernas de infarto o una figura de reloj de arena, resalta tu mejor rasgo con prendas que realmente se adapten a tu figura. Si bien esto está en consonancia con el uso de ropa que te quede bien, va un paso más allá para incluir prendas que hagan algo más que eso. Las prendas realmente favorecedoras atraerán la atención hacia tus mejores rasgos y restarán importancia a los puntos problemáticos. No tengas miedo de mostrar lo que tienes.
Las reglas
En el siempre cambiante mundo de la moda, las reglas parecen pasadas de moda y, de hecho, algo que hay que ignorar. En cambio, las reglas no deberían considerarse como tales cuando se trata de vestir lo mejor posible. Las reglas básicas de la moda se aplican tanto a los hombres como a las mujeres, y deben tenerse en cuenta a la hora de comprar nuevas prendas y construir un armario de trabajo que realmente vaya más allá para que una mujer se sienta más segura de sí misma.
Al fin y al cabo, ésa es la clave a la hora de comprar ropa nueva: debe quedar bien en la figura de una persona, no sobrecargarla o, esencialmente, vestirla en lugar de lo contrario. Desde las prendas más básicas para el día a día hasta los atuendos profesionales, la ropa que se ajusta y funciona bien en el armario de una mujer es un elemento básico de su repertorio.